Producto Interno Bruto
DEFINICIÓN: El PIB es el valor monetario de
los bienes y servicios finales producidos por una economía en un período
determinado. EL PIB es un indicador representativo que ayuda a medir el
crecimiento o decrecimiento de la producción de bienes y servicios de las
empresas de cada país, únicamente dentro de su territorio. Este indicador es
un reflejo de la competitividad de las empresas.
¿Por qué es importante que crezca el PIB?
Algunas
aclaraciones sobre el PIB
Inflación
La inflación
es el aumento generalizado y sostenido de los precios de bienes y servicios en
un país. Para medir el crecimiento de la inflación se utilizan indices, que
reflejan el crecimiento porcentual de una canasta de bienes ponderada. El
índice de medición de la infación es el Indice de Precios al Consumidor (IPC)
que en México se le llama INPC (Indice Nacional de Precios al Consumidor). Este
indice mide el porcentaje de incremento en los precios de una canasta básica de
productos y servicios que adquiere un consumidor típico en el país.
Existen
otros indices, como el Indice de Precios al Productor, que mide el crecimiento
de precios de las materias primas.
Causas de la Inflación Existen tres tipos de inflación:
Inflación generada por espectativas de inflación (circulo vicioso). Esto es típico en países con alta inflación donde los trabajadores piden aumentos de salarios para contrarestar los efectos inflacionarios, lo cual da pie al aumento en los precios por parte de los empresarios, originando un círculo vicioso de inflación.
La
devaluación es la disminución o pérdida del valor nominal de una moneda
corriente frente a otras monedas extranjeras. En el casó de Venezuela, seria la
reducción del valor del Bolivar vs el Dólar, el Euro, la libra esterlina, el
yen y en general cualquier moneda de otro país.
¿Por qué ocurre una devaluación?
![]() Decisión del Banco Central de devaluar la moneda. ¿Porque el Banco central buscaría disminuir el valor de su moneda ante otras? Esta medida buscar frenar las importaciones para protejer la economía local. Al momento de la devaluación, la mercancia procedente de otros países automáticamente incrementa su costo, y entonces se beneficia a la producción interna, aumentando el consumo interno de los productos nacionales, estimulando las exportaciones y reactivando la economía. Sin embargo, hay que tomar en cuenta también las consecuencias negativas de una devaluación antes de tomar (o dejar de tomar) una decisión macroeconómica tan importante.
Tasas de interés
![]()
Las tasas de
interés son el precio del dinero. Si una persona, empresa o gobierno requiere
de dinero para adquirir bienes o financiar sus operaciones, y solicita un
préstamo, el interés que se pague sobre el dinero solicitado será el costó que
tendrá que pagar por ese servicio. Como en cualquier producto, se cumple la ley
de la oferta y la demanda: mientras sea más fácil conseguir dinero (mayor
oferta, mayor liquidez), la tasa de interés será más baja. Por el contrario, si
no hay suficiente dinero para prestar, la tasa será más alta.
¿Cómo
influyen las tasas de interés en la economía?
Tasas de interés bajas ayudan al crecimiento de la economía, ya que facilitan el consumo y por tanto la demanda de productos. Mientras más productos se consuman, más crecimiento económico. El lado negativo es que este consumo tiene tendencias inflacionarias.
Tasas de
interés altas favorecen el ahorro y frenan la inflación, ya que el consumo
disminuye al incrementarse el costo de las deudas. Pero al disminuir el consumo
también se frena el crecimiento económico.
Los bancos
centrales de cada país utilizan las tasas de interés principalmente para frenar
la inflación, aumentando la tasa para frenar el
consumo.
Otra tasa de interés que se utiliza como indicador
macroeconómico es la TIIE (Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio), la
cual surgió en marzo de 1995 como necesidad de tener una referencia diaria de
la Tasa Base de Financiamiento. Los bancos la utilizan como tasa de interés
base para aumentarle su margen de intermediación.
Riesgo país y el EMBI
El riesgo
país es un indicador sobre las posibilidades de un país emergente de no cumplir
en los términos acordados con el pago de su deuda externa, ya sea al capital o
sus intereses; cuanto más crece el nivel del "Riesgo País" de una
nación determinada, mayor es la probabilidad de que la misma ingrese en
moratoria de pagos o "default".
Se pueden
mencionar tres fuentes de las que proviene el riesgo de incumplimiento de una
obligación:
En la práctica, el riesgo país se mide con el EMBI (Emerging Markets Bond Index), que fue creado por la firma internacional JP Morgan Chase y que da seguimiento diario a una canasta de instrumentos de deuda en dólares emitidos por distintas entidades (Gobierno, Bancos y Empresas) en países emergentes.
El EMBI, que es el principal indicador de riesgo
país, es la diferencia de tasa de interés que pagan los bonos denominados en dólares,
emitidos por países subdesarrollados, y los Bonos del Tesoro de Estados Unidos,
que se consideran "libres" de riesgo. Este diferencial (también
denominado spread o swap) se expresa en puntos básicos (pb). Una medida de 100
pb significa que el gobierno en cuestión estaría pagando un punto porcentual
(1%) por encima del rendimiento de los bonos libres de riesgo, los Treasury
Bills. Los bonos más riesgosos pagan un interés más alto, por lo tanto el
spread de estos bonos respecto a los bonos del Tesoro de Estados Unidos es
mayor. Esto implica que el mayor rendimiento que tiene un bono riesgoso es la
compensación por existir una probabilidad de incumplimiento. Riesgo país
Desempleo
“Situación en la que se encuentran las personas que teniendo edad, capacidad y deseo de trabajar no pueden conseguir un puesto de trabajo viéndose sometidos a una situación de paro forzoso”.
Causas del Desempleo.
El desempleo es el ocio involuntario de una persona que desea encontrar
trabajo, esta afirmación común a la que se llega puede deberse a varias causas.
Las mismas que citamos a continuación:
Cuando existe un descenso temporal que experimenta el crecimiento económico
caracterizado por la disminución de la demanda, de la inversión y de la
productividad y por el aumento de la inflación. La actividad económica tiene un
comportamiento cíclico, de forma que los períodos de auge en la economía van
seguidos de una recesión o desaceleración del crecimiento. En el momento que se
da una situación en la que el número de personas que demanda empleo sobrepasa
las ofertas de trabajo existentes, debido a que los elevados salarios reales
atraen a un mayor número de desempleados a buscar trabajo e imposibilitan a las
empresas ofrecer más empleo.
Cuando en ciertas regiones o industrias donde la demanda de mano de obra
fluctúa dependiendo de la época del año en que se encuentren. Cuando se dan
cambios en la estructura de la economía, como aumentos de la demanda de mano de
obra en unas industrias y disminuciones en otras, que impide que la oferta de
empleo se ajuste a la velocidad que debería. Adicionalmente esta situación se
puede dar en determinadas zonas geográficas y por la implantación de nuevas
tecnologías que sustituyen a la mano de obra. Cuando por causas ajenas a la
voluntad del trabajador impide su incorporación al mundo laboral.
¿Cómo se mide el desempleo?:
Las variaciones de la tasa de desempleo se obtiene mediante el
procedimiento conocido con el nombre de muestreo aleatorio de la población, se
lo hace con el fin de dividir a la población en grupos de acuerdo a su
situación laboral.
Tasa de desempleo: Es el porcentaje de la población laboral que no tiene
empleo, que busca trabajo activamente y que no han sido despedidos
temporalmente, con la esperanza de ser contratados rápidamente de nuevo.
Las tasas de desempleo varían considerablemente por cambios del volumen de
movimiento del mercado de trabajo, resultado del cambio tecnológico, lo que
conduce al cambio de empleo de una empresa a otra, de un sector a otro y de una
región a otra; además también según la edad, sexo y raza. La tasa global de
desempleo es uno de los indicadores más frecuentemente utilizados para medir el
bienestar económico global, pero dada la dispersión del desempleo, debería
considerarse que es in indicador imperfecto de dicho bienestar.Vease tambien el desempleo en Venezuela
Tipo de Cambio
Los tipos
de cambio se pueden definir de forma sencilla, como el precio de una
unidad monetaria extranjera expresado en términos de la moneda nacional;
análogamente se puede expresar el precio de nuestra moneda en términos de otra
extranjera. Por ejemplo el tipo de cambio del dolar de Estados Unidos con
respecto al Euro es de 0,74 euros/dolar, así como al revés sería de 1,35
dolar/euro; en resumen estamos expresando en nuestra moneda propia o en la
extranjera el valor de una unidad monetaria de euro o de dolar.
Esta
comparativa puede ser análoga para todas las divisas del mundo, que son en
definitiva las formas en las que actualmente se hacen las transacciones
monetarias así como se expresa el valor de los bienes y servicios.
Enmarcado dentro de los tipos de cambio, podemos hablar de dos tipos:
§ Tipo de cambio real: es en el que se valoran o precio relativo de los bienes y servicios dependiendo de la cuantía o situación de la moneda de cada uno de los países en los que se generen dichos bienes y servicios. En resumen, el valor de las actividades y cosas.
§
Tipo de cambio nominal: es propiamente dicha la
variación o fluctuación a lo largo del tiempo de los valores de una determinada
moneda o divisa en función de otra.
Cabe
destacar que los tipos de cambio son bastante importantes en varios sentidos;
primeramente para empresas que trabajen a nivel mundial como las
multinacionales, o empresas de importación han siempre de tener en cuenta el
movimiento de los tipos de cambio, ya que según las leyes de contabilidad
internacional, contablemente al menos se ha de hacer una revisión anual
de los tipos de cambio de nuestros activos situados en otras zonas monetarias;
así como si exportamos e importamos productos o servicios, estamos obligados
contablemente a expresar el valor de orígen así como el tipo de cambio y el
valor de nuestra propia moneda en la operación.
Otra cosa
fundamental de los tipos de cambio es que con ellos se puede valorar la
apreciación o depreciación de una moneda en términos de otra. Por ejemplo si 1
dolar ayer estaba a 167 yenes y hoy está a 165 yenes, el precio o mejor dicho
el valor del yen japones es mayor por lo que su valor con respecto al dolar se
habrá apreciado; del mismo modo podríamos decir que el tipo de cambio indica
que el valor del dolar se ha depreciado, ya que hacen falta 2 yenes menos para
tener la misma cantidad de dólares.
Sistemas Cambiarios: tipo de cambio
fijo y tipo de cambio variable
La autoridad monetaria, es
decir el banco central, se ocupa de realizar la política monetaria de un país;
es por esto que uno de sus atributos es la elección de un sistema cambiario,
que básicamente puede ser un sistema de tipo de cambio fijo o un sistema de
tipo de cambio variable.
Tipo de cambio
fijo
El Banco Central elige un
tipo de cambio nominal, respecto a la moneda de un país o economía que
generalmente es un país grande, estable, y de baja inflación. Estas
características fueron cumplidas por la economía estadounidense, la economía
alemana, y la región económica europea, es por esto que muchos países durante
la historia ha fijado sus tipos de cambio nominales respecto al dólar, al marco
alemán, y mas recientemente al euro.
El Banco Central compra y
vende la divisa de referencia al valor fijado por el mismo, de esta manera, el
tipo de cambio se mantiene fijo. Cuando el banco central compra divisas,
inyecta moneda nacional en la economía, es decir, aumenta la base monetaria, y
viceversa. Los variaciones de la base monetaria tienen efectos en el volumen de
los medios de pago, el costo y disponibilidad del crédito, las tasas de interés
y por consiguiente, en el volumen de inversión, consumo y la actividad
económica. Es por esto que la elección de un sistema cambiario en un elemento
muy importante para la política económica de un país.
Las ventajas de este sistema
es que se crea un ancla nominal (del tipo de cambio). Se restringe la
discrecionalidad de la política monetaria. Las expectativas del tipo de cambio
quedan fijas, y también las de los precios de los bienes transables y por lo
tanto de la inflación interna. Al eliminarse las expectativas inflacionarias
las tasas de interés suelen bajar.
Tipo de cambio variable.
Bajo un esquema de tipo de
cambio variable la relación de una moneda respecto de otras monedas estará
fijado por la oferta y demanda de divisas en el mercado.
En este caso, por ejemplo un
aumento en la demanda de dólares por parte de la economía incrementará el valor
de dicha divisa respecto del peso. La forma del ajuste (a la suba del precio
del dólar) puede darse de dos formas: o sube la tasa de interés interna o al
hacer más baratos en dólares los precios de los bienes argentinos aumentará la
venta de éstos últimos en el exterior provocando un ingreso de divisas que
estabilizará o disminuirá la presión compradora sobre el tipo de cambio.
Por el contrario, si un país
atrae capitales porque está creciendo o porque ofrece oportunidades de
inversión atractivas, recibirá muchos dólares apreciando por ende la moneda
local. La forma de ajuste se daría también a través del sector externo. La
apreciación del peso encarecería el valor de las exportaciones y abarataría el
valor de las importaciones. Al disminuir las ventas al exterior disminuiría la
oferta de divisas presionando al alza al tipo de cambio.
Las principales economías
del mundo, -Estados Unidos, Europa y Japón- han adoptado este esquema de tipo
de cambio. Las monedas del resto del mundo se vinculan de "alguna
manera" a las tres monedas líderes (dólar, euro y yen).
La autoridad monetaria puede
o no intervenir en la fijación del valor de la moneda. Sí no interviene se dice
que el esquema es de "flotación limpia". Si por el contrario, a
través de operaciones de mercado abierto, fija un "piso" y un
"techo" al valor de la moneda se dice que la flotación es sucia.
Balanza
de Pago
Las tarjetas de crédito nos envían estados de cuenta
cada mes, con él obtenemos un control sobre el manejo de nuestro dinero, nos
indica qué transacciones se han realizado en la cuenta, los depósitos que
recibimos y la manera en que invertimos o destinamos nuestros recursos.
De la misma manera, la balanza de pagos nos señala, a nivel nacional, la entrada y salida de divisas (moneda extranjera) en cuanto a exportaciones, importaciones, renta de trabajos en el extranjero, transacciones y capitales. Es decir, registra las transacciones económicas de nuestro país con el resto del mundo.
Esta
es una herramienta que nos permite observar el comportamiento económico en
relación a otros países, a los inversionistas les da señales para saber si es
oportuno o no invertir en el país y, por otro lado, nos ofrece un panorama
sobre cómo se administran nuestros recursos.
La balanza de pagos está conformada por dos cuentas importantes: cuenta corriente y cuenta financiera.
Cuenta corriente, integrada
por:
Pagos derivados de comercio de mercancías (productos que se importan y
exportan) y de servicios como, por ejemplo, turismo, fletes de transporte,
servicios de empresas, servicios de seguros.
Cuenta de
rentas
Pagos derivados de la realización del trabajo en otro país, ya sea de nuestro
trabajo en otro país y viceversa.
Cuenta
de transferencias
En esta cuenta se consideran las remesas, es decir, el dinero que nuestros
inmigrantes envían a sus familias. Así como donaciones en especie realizadas
por instituciones a residentes en el extranjero.
Cuenta
financiera, integrada por:
Inversión
Extranjera Directa
Compra de activos físicos: bienes que por sí mismos no tienen utilidad, pero que son una fuente de servicios. En este caso, se trata de infraestructura, una fábrica o terreno.
Inversión
en cartera
Compra de activos financieros: se trata del dinero que se invierte en una
empresa sin rebasar cierto valor de la firma, es decir, acciones y valores.
La balanza de pagos funciona bajo la siguiente ley:
1. Si los pagos o
inversiones son ingresos de otro país hacia el nuestro, entonces tendremos un
saldo positivo (+).
2. Si los pagos e inversiones son realizados de México hacia el resto del mundo, tendremos un saldo negativo (-).
Si tu estado de cuenta
indica que los gastos superan tus ingresos, eso quiere decir que estás
consumiendo más de lo que puedes pagar y, por lo tanto, generas un adeudo. A
nivel nacional "un déficit en cuenta corriente es muestra de que el país
gasta más de lo que produce"2.
Si el resultado es negativo, entonces podemos decir que tenemos un déficit, si
es positivo lo llamamos supéravit.
LOS
AGENTES ECONÓMICOS
El consumo, la producción y la distribución son actividades
humanas que tienen como fin último la satisfacción de necesidades empleando
recursos escasos. Todas estas actividades se denominan actividades económicas
porque en ellas está presente el coste de oportunidad, ya que al realizarlas
hay que tomar decisiones renunciando a las opciones no elegidas. Dichas
decisiones son tomadas por los agentes económicos (familias, empresas y sector
público), los cuales son los protagonistas o los decisores de la economía. Es
decir, alguien que se ocupa de decidir qué consumir, cómo producir o dónde
distribuir, y de cuyas decisiones depende la marcha de su economía y, por
tanto, la de todos en general. De ahí, que a quienes deciden sobre estas
cuestiones se les denomine también decisores o protagonistas de la economía.
Las
decisiones que pueden tomar los distintos agentes económicos dependen del
sistema económico en el que operen, como podemos observar en la siguiente
tabla:
Cuando un agente económico toma una decisión está renunciando
a la opción no elegida. Por ejemplo, si el sector público decide gastar en
educación en lugar de en carreteras, está renunciando a los posibles beneficios
que le reportaría esta última opción.
Pero, ¿cómo elegir? ¿Existe algún criterio general que
rige el ánimo de las personas cuando toman decisiones? Sí. Se supone que las
personas tienen un comportamiento racional, por lo
que al resolver el problema de la escasez económica (necesidades ilimitadas
frente a recursos escasos) intentarán tomar siempre la mejor decisión posible,
es decir, aquella que les reporte mayor utilidad o bienestar
JUSTIFICACIÓN DE LA INTERVENCIÓN DEL SECTOR PÚBLICO
EN LA ECONOMÍA
Las economías en la vida real no se ajustan totalmente al
mundo idealizado de la mano invisible que funciona armoniosamente, descrito por
Adam Smith. Lo cierto es que, aunque el mercado es un mecanismo eficiente, ya
que garantiza que lo que se produce es lo que quieren los consumidores, y
además se hace al menor coste posible, presenta una serie fallos, que son:
A. LAS EXTERNALIDADES
Existe una externalidad cuando la producción o el consumo de
un bien afecta directamente a consumidores o empresas que no participan ni en
su compra ni en su venta, sin que estos efectos se reflejen en los precios de mercado.
Podemos distinguir entre externalidades positivas y negativas.
Cuando una persona arroja basura a la calle o cuando una
empresa contamina su entorno, son otras las personas que sufren las
consecuencias. Los causantes de estas externalidades negativas no soportan las
consecuencias ni pagan por ello.
Los ejemplos de externalidades
negativas o de costes
sociales son muy diversos. Así, la producción de cemento es altamente
contaminante, afectando a la población y al entorno cercano de las fábricas que
lo producen. La actividad de algunos bares y discotecas no afecta sólo a sus
clientes, sino que también genera ruido, problemas de aparcamiento, etc., que
causan molestias al vecindario. También existen externalidades en el consumo,
por ejemplo, el consumo de tabaco genera importantes problemas de salud que
conllevan un elevado coste para la sanidad pública.
Como estos efectos externos no repercuten en los costes de
las empresas, tampoco se reflejan en los precios de mercado de esos bienes. Se
dice entonces que el mercado falla, porque informa mal de lo que realmente
ocurre, ya que los precios no recogen los costes reales, es decir, los costes
privados que tiene la empresa más los costes sociales.
En otro extremo están las externalidades
positivas. Un ejemplo claro es el de la investigación científica y los
descubrimientos que una empresa pueda conseguir (motores de automoción menos
contaminantes, reciclaje eficiente de recursos, etc.), de los que se benefician
otras empresas y la sociedad en general. Otros ejemplos son la investigación
para prevenir enfermedades contagiosas o sobre el genoma humano, cuyos avances
científicos suponen beneficios que repercuten en el conjunto de la sociedad.
Tampoco aquí los precios del mercado reflejan todos los
efectos positivos que la empresa que los genera se merece.
B. LOS BIENES PÚBLICOS
Los bienes públicos son el ejemplo extremo de
externalidad positiva. Se
definen como aquellos bienes que son no
rivales y no excluibles en
su consumo. La no rivalidad implica que el coste de extender el servicio a una
persona adicional es cero. Un ejemplo sería un faro de mar, pues que un barco
se guíe en su travesía marítima gracias a la luz del faro, no impide que muchos
otros barcos puedan aprovecharse del mismo servicio. Además, que un barco
adicional se beneficie de los servicios ofrecidos por el faro, no aumenta los
costes de provisión. Por otra parte, la no excluibilidad significa que es
imposible impedir que una persona utilice ese bien. También sería el caso del
faro ya que, una vez instalado alumbra a todos los barcos.
Aunque no abundan los ejemplos de bienes públicos puros, si
hay una gran variedad de bienes que reúnen alguna de estas características,
como pueden ser la educación o las campañas de vacunación.
El problema de este tipo de bienes es que a las empresas
privadas no les resulta rentable producirlos, debido a la aparición de los consumidores parásitos, por eso se producen en cantidad
insuficiente para lo que es deseable para el conjunto de la sociedad.
C. LA COMPETENCIA IMPERFECTA
Cuando en el mercado no existe competencia porque se
mantienen posiciones de monopolio u oligopolio, los productores utilizan su
poder para imponer unos precios y unas cantidades que no son los que satisfacen
los deseos de los consumidores.
A veces, algunas empresas se ponen de acuerdo para restringir
la producción con la finalidad de alterar los precios (ejemplo: cuando la OPEP
disminuye la producción de petróleo); o se reparten el mercado en detrimento de
otros competidores (es el caso de las compañías eléctricas, en la mayor parte
de Andalucía sólo puedes contratar la luz con Sevillana); o abusan de una posición
dominante para influir sobre los precios y conseguir mayores beneficios
(también es el caso de las compañías eléctricas, sino comprueba lo que ha
subido la factura de la luz en los últimos años).
Además, la ausencia de competencia puede favorecer que la
rutina sea la norma que guíe los procesos de producción, retrasando la adopción
de innovaciones y la incorporación de nuevas tecnologías.
D. LOS CICLOS ECONÓMICOS
E. LA DESIGUAL DISTRIBUCIÓN DE LA RENTA Y LA RIQUEZA
Las economías de mercado suelen ser productivas y eficientes en la producción de la riqueza, pero no lo son tanto en cómo se reparte esa riqueza. Ésta es una de las quejas más frecuentes contra el mercado, en la que coinciden todos los economistas.
No todas las personas nacen con las mismas oportunidades ni
con las mismas capacidades. El mecanismo de mercado se asienta, pues, en un
reparto previo de la renta y la riqueza que es desigual, y esa desigualdad
determina la capacidad de las personas para participar en el consumo. Es decir,
los mercados funcionan como una subasta; se asignan los bienes a aquellos que
pueden pagarlos. Si no hay ninguna intervención externa al mercado, este
necesariamente reproduce la desigualdad. Aquellos que perciben una renta tan
baja que apenas les permite sobrevivir, difícilmente pueden participar en el
mercado si no es con ayuda del Estado.
POLÍTICAS
Conjunto de medidas que
implementa la autoridad económica de un país tendiente a alcanzar ciertos
objetivos o a modificar ciertas situaciones, a través de manejos de algunas variables
llamadas instrumentos. Para que la Política Económica, generalmente de corto plazo, sea consistente, debe reunir dos
condiciones: que los fines sean compatibles y las metas sean homogéneas.
La definición de la
política económica impone a la autoridad la doble tarea de seleccionar y
jerarquizar las metas u objetivos y asignar a ellos los instrumentos que permitirán
alcanzarlos. Los objetivos de la política económica son conseguir el pleno empleo de
los recursos, obtener una alta tasa de crecimiento de la economía, mantener un nivel de precios estable,
propender al equilibrio externo
y mantener una distribución justa
del ingreso.
Un problema difícil de
resolver en Política Económica es
la cuestión de armonizar los diferentes objetivos entre sí, debido a que la
consecución de todos ellos simultáneamente puede crear conflictos y resultar
imposible; como por ejemplo, conseguir el pleno empleo de
los recursos y
la estabilidad de los precios.
Es por esto que la
teoría económica señala la importancia de asignar a cada objetivo su variable
instrumento particular.
Las diferentes metas de
la política económica se relacionan al manejo de distintas variables, lo que
lleva a hablar de Política Monetaria, Política Cambiaría, Política Fiscal, etc.
LA POLÍTICA FISCAL
La
política fiscal es la actuación intencionada del sector público (Estado,
Comunidades Autónomas, Ayuntamientos y Seguridad Social), mediante la
recaudación de fondos (principalmente impuestos) y la aplicación de gastos
públicos, para alcanzar los objetivos fijados por el Estado. Para la política
fiscal, los objetivos principales
son atenuar los efectos del ciclo económico y redistribuir la renta de forma
más equitativa.
A.
INSTRUMENTOS DE POLÍTICA FISCAL
Los
instrumentos de política fiscal de los que disponen los gobiernos son las
políticas fiscales discrecionales y los estabilizadores automáticos.
Políticas
fiscales discrecionales. Son
las que aplican los gobiernos cuando quieren influir sobre los ingresos o
gastos intencionadamente, es decir, las que deben activarse por iniciativa
propia porque no están regladas. Las políticas discrecionales pretenden
mantener el tono de la actividad económica, ya que normalmente en épocas de
crisis contribuyen a evitar la caída del nivel de producción de bienes y
servicios Las principales son:
Estabilizadores
automáticos. Son los
ingresos o los gastos públicos que aumentan o disminuyen a la par que el nivel
de producción de un país. Con el uso de los estabilizadores automáticos, las
transiciones entre las fases de los ciclos económicos de expansión y recesión
son más breves y menos traumáticas. Los principales estabilizadores automáticos
son:
B. TIPOS DE POLÍTICA FISCAL ![]() § En las fases recesivas del ciclo se genera paro al ser la demanda agregada insuficiente. Ante esta situación, el Estado aplica una política fiscal expansiva, consistente en disminuir los impuestos (por ejemplo, el IRPF o IS) y aumentar el gasto público (puede realizar obras públicas o aumentar las transferencias a las familias y a las empresas). Estas medidas permiten que aumente la renta disponible y, en consecuencia, el consumo de las familias. Esta situación, a su vez, generará unas expectativas favorables para las empresas, las cuales, aumentarán su inversión. El aumento que se produce tanto del consumo como de la inversión, dos componentes importantes de la DA, provocan que ésta aumente (gráficamente se produciría un desplazamiento de la curva de DA hacia la derecha). Los efectos finales positivos serían que aumentaría la producción y el empleo, pero también habría una consecuencia negativa, el incremento de los precios (inflación).
§ En las fases expansivas del ciclo no existe el
problema de desempleo pero sí de inflación (subida generalizada y sostenida de
los precios). En este caso, el Estado aplica una política fiscal contractiva,
aumentando los impuestos y disminuyendo los gastos públicos. En esta ocasión
los efectos en cadena que se van a producir serán al contrario que
anteriormente.
LA POLÍTICA MONETARIA
El banco central de cada país emite el dinero legal y
controla la cantidad de dinero en circulación (oferta monetaria). Cuando se
crea más dinero del necesario, los precios tienden a subir, por lo que
controlar la oferta monetaria es fundamental para mantener estable el nivel de
precios.
Por su parte, los cambios en el tipo de interés influyen en
el gasto total de una economía, ya que tanto el consumo como la inversión
dependen de la capacidad de los agentes económicos para obtener préstamos y del
precio que pagan por ellos.
La política monetaria está constituida por las decisiones que
la autoridad monetaria lleva a cabo sobre el precio del dinero (el tipo de
interés) y la cantidad de dinero en circulación (la oferta monetaria) con el
objeto de facilitar el crecimiento económico, el empleo y la estabilidad de
precios.
OBJETIVOS
·
Estabilidad
del valor del dinero
·
Plena
ocupación (mayor nivel de empleo posible)
·
Evitar
desequilibrios permanentes en la balanza de pagos
MECANISMOS
El banco central puede modificar la cantidad de dinero directamente, pero hay otras formas de
cambiar la cantidad de dinero en circulación, estas son:
Variación del tipo de interés
Indica cuánto hay
que pagar por el
dinero que nos presta un
banco.
Por eso, si el
tipo de interés es muy alto, no todos los inversores
podrán permitírselo, y no pedirán muchos préstamos. El dinero se quedará en el
banco. En cambio,
una bajada de los tipos de interés incentiva la inversión y la actividad económica, ya que los
empresarios dispondrán fácilmente de dinero para invertirlo en sus proyectos.
Por tanto, los
cambios en la tasa de interés están relacionados directamente con la cantidad
de dinero que circula en el mercado.
Variación del
coeficiente de caja
El coeficiente de
caja (o encaje bancario o coeficiente
legal de reservas) indica qué porcentaje del dinero de un banco ha de
mantener en reservas líquidas, o sea, guardado sin poder usarlo para dejarlo prestado. Se hace
para evitar riesgos.
Si el banco
central decide reducir este coeficiente (guardar menos dinero en el banco y
prestar más), eso incentiva a la economía y aumenta la cantidad de dinero en
circulación, ya que se pueden conceder aún más préstamos. Si el coeficiente
aumenta, el banco se reserva más dinero, y no puede conceder tantos préstamos.
La cantidad de dinero baja.
De esta forma, el banco puede aportar o quitar dinero del mercado sin tener que fabricar más moneda.
Compra/Venta de Deuda Pública
La deuda pública
consiste en títulos emitidos por el
Estado, y pueden ser letras, bonos y obligaciones. Básicamente, son
papeles que se le compran por un precio,
y que al cabo de un tiempo nos comprarán por otro, probablemente
mayor.
Si el Estado pone de golpe a la venta muchos
títulos, y la gente los compra, el Estado está recibiendo dinero de la gente, y
por tanto la gente dispone de menos dinero. De esta forma está reduciendo la
cantidad de dinero disponible en el mercado. En cambio, si el Estado decide
comprar títulos (recibir los papeles y dar dinero a cambio), está inyectando
dinero en el mercado, ya que la gente dispondrá de dinero que antes estaba
guardado.
Éste es el objetivo de la deuda
pública, pero, como su nombre indica, el dinero retenido debe ser
devuelto en el futuro.
TIPOS DE POLÍTICA MONETARIA
Política
monetaria expansiva
Cuando en el
mercado hay poco dinero en circulación, se puede aplicar una política monetaria
expansiva para aumentar la cantidad de dinero. Ésta consistiría en usar alguno
de los siguientes mecanismos:
· Reducir la tasa de interés, para hacer más
atractivos los préstamos bancarios.
· Reducir el coeficiente de caja, para poder
prestar más dinero.
· Comprar deuda pública, para aportar dinero al mercado.
r = tasa de interés
OM = Oferta Monetaria
E = Tasa de equilibrio
DM = Demanda de dinero
En la gráfica se
ve cómo al bajar el tipo de interés (de r1 a r2),
se pasa a una situación en la que la oferta monetaria es mayor (OM1).
Política monetaria restrictiva
Cuando en el
mercado hay mucho dinero en circulación, interesa reducir la cantidad de
dinero, y para ello se puede aplicar una política
monetaria restrictiva. Consiste en lo contrario que la expansiva:
· Aumentar la tasa de interés, para que pedir
un préstamo sea más caro.
· Aumentar el coeficiente de caja, para dejar más
dinero en el banco y menos en circulación.
· Vender deuda pública, para quitar dinero del mercado
cambiándolo por títulos.
OM = Oferta Monetaria
E = Tasa de equilibrio
DM = Demanda de dinero
De OM0 se puede pasar a la situación OM1 subiendo el tipo de interés. La curva de demanda de dinero tiene esa forma porque a tasas de interés muy altas, la demanda será baja (cercana al eje de ordenadas, el vertical), pero con tasas bajas se pedirá más (más a la derecha).
POLÍTICA CAMBIARÍA
Como regla general, no
existe un criterio único que sirva para seleccionar el esquema cambiario más
apropiado para una economía. Limitaciones
importantes para tal escogencia las impone el objetivo al cual las autoridades económicas
le otorguen prioridad, los shocks que afectan la economía y sus características
estructurales (Aghevli et al 1991 y Guitián 1994). Si de lo que se
trata es de estabilizar el producto en torno a su tendencia, la selección del
arreglo cambiario debe considerar la naturaleza de los shocks que experimenta
la economía.
![]()
Esta orientación general enfrenta la dificultad de poder
discernir con algún grado de precisión la predominancia de un tipo de shock
sobre otro, dado el hecho que la
economía puede enfrentar dislocaciones simultáneas en ambos mercados o que en
algunas coyunturas prevalezca uno y en otra cambie el sentido de la
perturbación.
Tipo
de Cambio Fijo
No obstante las
consideraciones anteriores, se reconoce que un régimen de tipo de cambio fijo
exhibe un conjunto de atributos que
pueden resultar muy eficientes en la lucha contra la inflación (Mishkin 1999, Frankel 1999). Entre estos
atributos destacan, en primer lugar, que el mismo representa un ancla
nominal poderosa que ayuda a resolver el
problema de la inconsistencia temporal, típica de los esquemas de política
donde predomina la discrecionalidad. Al
estar comprometido el banco central a mantener la estabilidad del tipo de
cambio, en principio, la política monetaria actúa automáticamente
remonetizando o desmonetizando la
economía a través de la variación de las
reservas internacionales, según se comporten la expansión del crédito interno
y la demanda de dinero. Como el banco central no tiene espacio para una
política monetaria discrecional, las
sorpresas inflacionarias y las
consiguientes ganancias de producción,
no son posibles, con lo cual se emiten las señales que hacen de la estabilidad
de precios el compromiso único de la autoridad monetaria.
En segundo lugar, el
tipo de cambio como instrumento de estabilización tiene la bondad de que es
simple de entender por el público. Generalmente,
la asociación tipo de cambio y nivel de precios interno funciona en favor de la
estabilidad cuando los agentes suponen que la fijación del tipo de cambio tiene
bases sólidas y perdurables, lo que se expresa en una disminución de las expectativas de inflación.
Si la política de fijación del tipo de cambio es creíble, en realidad lo que
sucede es que la economía asume la política monetaria del país cuya moneda
actúa como ancla, bajan las expectativas de inflación y los precios tenderían a converger a la
inflación internacional (Mishkin 1997).
Finalmente, una
política de cambio fijo creíble genera
certidumbre sobre la senda de la
economía y ayuda a controlar los efectos
de la volatilidad de los mercados internacionales, mejora las expectativas de los inversionistas e incentiva los flujos comerciales.
Las desventajas
fundamentales del tipo de cambio fijo son, en primer lugar, la pérdida de independencia de la política monetaria
para estabilizar la economía y, en segundo término, la exposición
de ésta al tener que depender
principalmente de la política fiscal, sin descartar el uso de la política
comercial (Calvo 1999), para enfrentar
cualquier perturbación, real o monetaria. Ciertamente, fijar el tipo de cambio
implica que el banco central pierde el control sobre los agregados monetarios y
en un entorno de movilidad de capital, la tasa de interés tiende a determinarse
por la ecuación de arbitraje. En tales circunstancias, las autoridades
monetarias ven constreñidos los grados de libertad para actuar ante algún
elemento que modifique el equilibrio de la economía. Como ejemplo podría
mencionarse un aumento exógeno de los salarios; en este caso, el banco central
no puede hacer frente a esta alteración
en el mercado laboral modificando las condiciones del mercado monetario y, con ello,
la tasa de interés, para neutralizar el impacto inflacionario del alza
salarial.
La fijación del tipo de
cambio implica que las autoridades económicas pierden dos instrumentos de
política: la cambiaria y la monetaria, aunque ésta última puede utilizarse para defender las reservas internacionales. La limitación
de instrumentos de política a la disposición
de las autoridades se traduce en un esfuerzo significativo de la política fiscal, el cual no siempre es posible en la
magnitud y oportunidad requeridos para
encarar algún desequilibrio.
Adicionalmente, frente, por ejemplo, a
un shock adverso en los términos de intercambio, la economía puede
demandar una política fiscal
restrictiva, lo cual puede profundizar la recesión e incluso comprometer la
vigencia misma del arreglo cambiario.
Uno de los
elementos comunes en un entorno internacional donde predominan
los flujos de capital, lo constituyen los constantes ataques especulativos a los
cuales están sometidas las monedas; especialmente aquéllas donde el compromiso cambiario de las
autoridades no es lo
suficientemente creíble o donde los fundamentos de la economía no están completamente en orden (Obstfeld y
Rogoff 1995)
Por ello y como
resultado de la falta de credibilidad que suelen generar los esquemas de “tipo
de cambio fijo pero ajustable”, es cada vez mayor la orientación hacia la fijación irreversible del tipo de
cambio, aunque la adopción de juntas monetarias o cajas de conversión para
restituir la credibilidad, supone decisiones
extraordinarias en materia institucional y de ordenamiento de la
política macroeconómica que algunas
veces resultan difíciles de aplicar
tanto por la carencia del consenso
político necesario, como por la falta de convencimiento por parte de los
diseñadores de la política económica.
Tipo
de Cambio Flexible
En un esquema de tipo
de cambio flexible, en su versión más pura, el banco central no interviene en el mercado cambiario para
regular el curso de la cotización. Es la
confluencia de oferentes y demandantes
de divisas la que finalmente
determina el precio final de una moneda
en términos de otra. En realidad, esta modalidad ha sido la excepción antes que
la regla por cuanto la actuación de los bancos centrales, aún en las economías
menos reguladas, ha procurado moderar, mediante intervención en el mercado, las
amplias fluctuaciones de los tipos de
cambios que suelen acompañar a monedas cuyos fundamentos no están totalmente alineados e incluso, las que estándolo, son objeto de ataques
especulativos.
Al adoptarse un esquema
de flotación del tipo de cambio, el
banco central está en capacidad de hacer
una política monetaria activa capaz de
influir sobre el ciclo económico mediante cambios en la tasa de interés. Sin embargo, este control que ahora ejercería
la autoridad monetaria está condicionado y restringido por el grado de
movilidad de capital por cuanto el
efecto de cambios en la tasa de interés incide directamente sobre los flujos de
capital, el tipo de cambio nominal y real y, en consecuencia, sobre la demanda
agregada. Así, el impacto de una política monetaria restrictiva que propicie un
aumento de la tasa de interés puede ser total o parcialmente anulado por una entrada de capital que
reponga los niveles de liquidez y con ello una caída de la tasa de interés.
Cuando impera un sistema de tipo de cambio flexible, los
agregados monetarios son la variable que
el banco central administra para alcanzar
las metas de inflación. No obstante, la evolución de los agregados está
determinada por el comportamiento de la gestión fiscal, la cual tiende a ser la
principal fuente de perturbación monetaria y de desvío de la inflación respecto
el nivel objetivo de las autoridades.
Bandas
de Fluctuación
El sistema de bandas
representa un híbrido que intenta acotar
la volatilidad del tipo de cambio dentro
de una banda al tiempo que esa relativa flexibilidad del tipo de cambio otorga un margen mayor de autonomía a la política
monetaria. De esta forma, bajo un régimen de bandas se procura, por una
parte, retener la principal ventaja
del esquema de tipo de cambio fijo al
minimizar las oscilaciones del tipo de cambio nominal con lo cual se conservarían
las propiedades de ancla del tipo de cambio y, por la otra, contar con instrumentos
de política monetaria para instrumentar medidas contracíclicas.
La amplitud de la banda
define las propiedades que se desean obtener del sistema. Así, para amplitudes
grandes, se privilegia una mayor independencia de la política monetaria y consecuentemente
un mayor rol estabilizador a los agregados monetarios. Contrariamente, una
amplitud pequeña es sinónimo de que el tipo de cambio nominal funge como ancla
del sistema de precios.
En aquellas economías
donde por primera vez se adoptó este esquema ello obedeció a la necesidad de
enfrentar excesivas volatilidades del tipo de cambio nominal y los permanentes
desalineamientos de los tipos de cambios reales. Por su parte, la puesta en
práctica de las bandas de fluctuación en los países menos desarrollados se
fundamentó en la necesidad de tener un ancla para las expectativas de inflación
después de que en estos países habían fracasado los programas de estabilización
basados en el anclaje del tipo de cambio (Helpman et al 1994, Vergara 1994 y Le
Fort 1995).
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario